Existen muchos hechizos que pueden hacerse con tan solo una vela. Para efectuar este tipo de rituales de amor no hace falta que el hombre amado muestre algún tipo de sentimiento, puesto que el propio hechizo estimulará en su corazón, mas es de máxima importancia que la persona practicante tenga un sentimiento puro de amor hacia ese hombre.
Bien, puesto que en un caso así este hechizo de amor , donde el primordial elemento ya hemos citado que va a ser la miel, trata sobre todo de hacer que por medio hechizos de amor con pelo de este elemento, esa persona que deseamos que se enamore de nosotros se endulzure con la miel y sea mucho más dulce y agradable con nosotros.
Los amarres que se conocen como caseros son hechizos que puedes fabricar desde la comodidad de tu hogar, recuerda que la magia y en especial la magia wicca se hace en la magia de amor con cabellos naturaleza, prácticamente todos sus rituales exigen la fabricación de un altar en la mitad de un bosque, donde tengamos contacto con los elementales y elementos de la naturaleza.
Deseo estar y di el nombre de la persona tres veces, piensa en lo que deseas que ocurra con esa persona en la siguiente semana y repite para ti seis veces, ahora piensa en lo que deseas con esa persona y dilo para ti una vez, y ahora di… rayo de luz yo te invocó para que desentierres a GACHV – de donde este con quien esté y lo hagas llamarme el día de hoy mismo enamorado y arrepentido desentierra todo lo q esta impidiendo que GACHV – venga a mi ZIG- separa a todos y cada uno de los que contribuyen a que nos apartemos y que el no piense más en otras mujeres que solo piense en MI ZIG- que el me llame y me ame.
Los resultados de este hechizo de amor con miel los empezarás a ver una vez transcurridos de diez a 20 días, exactamente el mismo tiempo que tarda en hacer efecto estos amarres poderosos a la santa muerte , todo depende de la fe y la fuerza de voluntad que le hayas puesto a la hora de efectuarlo.
Villa Atamisqui es una localidad argentina de la provincia de Santiago del Estero, asentada en la margen derecha del río Dulce, a 121 km de la capital provincial. Es la cabecera del departamento Atamisqui, y municipio de 3.ª Categoría.
Sus 2683 habitantes (INDEC, 2001) constituyen un incremento importante en relación a los 1837 habitantes (INDEC, 1991) de la anterior medición y representan el 27 % de la población total del departamento.