tres Poderosos Hechizo Para Endulzar A Un Hombre Usando Miel Y Azúcar
La miel no solo te servirá para preparar un postre una excelente merienda, también te va a ser muy útil para preparar un hechizo de amor con miel, que usualmente tienen su efecto al cabo de una semana. Primero toma tu papel y escribe el nombre de la persona a dulcificar 3 veces. seis Cuando las fotografías estén escritas, las introduces en el frasco anteriormente llenado con miel. Hago entrega de este río con orina para que (NOMBRE DE LA PERSONA) venga cara mi y estemos juntos para siempre.
cinco Recoge las cenizas de la fotografía sobre la hoja de papel, extiende la canela en polvo, dobla el papel escrito en cuatro partes y amárralo con el hilo colorado. Guarda el frasco en un lugar seguro y cuando sientas que lo precisas que deseas fortalecer esa dulzura, recupera el frasco y vuelve a encender otra vela al lado del frasco con miel.
La miel ha sido y va a ser unos los elementos más esenciales en la realización de los hechizos de amor, puesto que cuando se emplea en un conjuro lo que hacemos es atraer lo pegajoso y sobre todo lo dulce de exactamente la misma. seis Coloca la fotografía de tu ex en el fondo del tarro vacío y vierte el contenido del tarro lleno, conforme vayas mezclando repite lo siguiente: Este dulce de amor sirva para para alumbrar tu camino de regreso, menciona su nombre.
Escribe en el papel el nombre de la persona que quieres dulcificar. 5 Observa la candela y concéntrate mientras repites la próxima amarres de amor con miel plegaria: En esta copa de miel de atrayente dulzor bañan mis guías espirituales mis finanzas para que el dinero vengo a mi casa y no se vaya.
Efectuando amarres de amor con miel. 2 Toma la hoja de papel y escribe lo siguiente: Con toda la fuerza de mi corazón escribo que (el nombre de la persona) y (tu nombre) se unirán fuertemente. En el mundo espiritual los rituales con candelas de miel sirven de la misma forma: atrayendo al sexo opuesto, al amor de tu vida, energías positivas, amistades, etc.
El Ceibal, también conocido como Ceibal (o Seibal, en inglés y alemán), es un sitio arqueológico de la civilización maya del Período Clásico, situado a orillas del río La Pasión en el departamento de Petén en Guatemala. Era la ciudad maya más grande de la cuenca del río La Pasión.[1]
Su ocupación poblacional se remonta al Período Preclásico y se extiende hasta el Clásico Terminal, con un hiato significativo.[1][2] La fase principal de su ocupación data del Preclásico Tardío (400 a. C. – 200 d. C.), y fue seguida por un declino poblacional en el Clásico Temprano (200 – 600 d. C.).[1]